AUDIO-VIDEO: Agarrón entre Miguel Angel Torres, de prensa de alcaldesa y vocero de Ex gobernador Jaime Bonilla

Después del pasado Primer Informe de Gobierno de la alcaldesa de Tijuana, parece oficial la ruptura de lealtad que guardó Montserrat Caballero hasta hace algunos meses al proyecto de Jaime Bonilla, debilitando a su grupo y fortaleciendo a Marina del Pilar. Lo que ahora nos trae al enfrentamiento de sus dos jefes de prensa, quienes en defensa de lo suyo salieron a contraponer sus ideas frente a un programa con audiencia nacional esta semana.

El antiguo coordinador de Comunicación Social del Gobierno del Estado, Juan Antonio Guízar Mendía, expuso en su espacio en Primer Sistema de Noticias (PSN) audios donde Miguel Ángel Torres Ponce, actual director de Comunicación Social del Ayuntamiento de Tijuana, le pide que retire comentarios que cuestionan el desempeño de la alcaldesa Montserrat Caballero, y en el futuro -de ser posible- los evite.

Como lo dice el propio Miguel Ángel, «se supone que somos del mismo equipo, Juanito», en referencia a su adscripción a la tribu bonillista. Lo anterior, además, obviando que su responsabilidad como locutor y periodista -según Torres- es orientar a los radioescuchas que dicen «pendejadas». Entre ellas, el mencionar que tal vez Armando Ayala, alcalde de Ensenada, fungiría mejor a cargo de la presidencia de Tijuana.

Juan Guízar, por su parte, decidió reprimirse de hacer amplios comentarios acerca de lo sucedido, y se limitó a comentar que los audios son pruebas de la impertinencia del director de Comunicación Social de Tijuana, Miguel Angel Torres Ponce.

«El ser crítico de alguna aberración o errores de quien administra una ciudad no se trata de simpatía, sino de un ejercicio democrático en donde el pueblo tiene el derecho de expresarse», dijo el locutor, vinculado a su vez a la administración de Ensenada.

Aunque las acusaciones hacia el equipo de comunicación de la alcaldesa de Tijuana no fueron hechas en vano. Esto más bien parecería ser un último intento de protagonismo por parte del bonillismo. Dejando atrás el cacicazgo de Bonilla, y después de las notorias pruebas de aprecio por parte de Montserrat Caballero hacia la gobernadora Marina del Pilar, se ha mandado un mensaje de paz entre ambas morenistas.

Y daría la impresión de que las dos mandatarias están dispuestas a unir sus administraciones sin enemistades de por medio. Sin embargo, aún quedan rezagos de la influencia política de Jaime Bonilla. «Hoy más que nunca, la comunicación y la relación con el Ayuntamiento [de Tijuana] está en las mejores condiciones», dijo la alcaldesa en relación a su acuerdo con el Gobierno del Estado. Más allá de los altercados, lo que es seguro es que lo que antes era una fuerza mayoritaria pasó a ser solo una oposición al poder.