La doctora Tri Haharani es la «Reina de las serpientes». Única especializada contra el veneno de este reptil.
-
- Astudestra Ajengrastri
- Título del autor,BBC News/27 octubre 2025/
Como doctora en una sala de emergencias, Tri Maharani ha presenciado la muerte de muchas personas. Pero lo que nunca olvidará será el rostro de un paciente que murió por la mordedura de una serpiente hace 15 años.
Afectado por el veneno, el hombre de unos 30 años le tomó la mano y le rogó para que le salvara la vida. Le decía que no se quería morir porque su bebé aún no había cumplido ni siquiera un año.
«Había muchos doctores en el hospital, pero no pudimos ayudarlo», dice Maharani.
En ese entonces Indonesia no tenía un experto médico en mordeduras de víboras ni guías de tratamiento para este tipo de emergencias, a pesar de que es uno de los países con mayor número de especies de serpientes venenosas del mundo.
Maharani se convenció de que había que cambiar eso y decidió estudiar toxinología (la ciencia que estudia toxinas) después de terminar un doctorado en ciencias biomédicas en Bélgica, en 2012.
Luego se dedicó a viajar por cada región de su país, conformado por 18.000 islas, para recolectar información y tratar a pacientes que hubieran sufrido mordeduras.
En 2017 completó sus estudios en toxinología con una beca en Australia.
De acuerdo a datos oficiales, se estima que en Indonesia hay cerca de 135.000 ataques de serpientes cada año, de los cuales 10% resultan mortales.
Pero Maharani sostiene que el número es mucho mayor debido a que muchos pacientes se intentan curar solos o acuden a curanderos locales.
Después de succionar el veneno, ellos aplican una solución de agua caliente, cebollas rojas o rocas negras en las heridas. El problema es que esos tratamientos artesanales pueden dañar los tejidos o incluso causar la muerte.
El número de mordeduras también está aumentando porque las serpientes están cada vez más en contacto con los humanos por la creciente urbanización y por el cambio climático.
Un problema global
Las mordeduras de serpientes no son solo un tema de salud pública en Indonesia.
Hay cerca de 2,7 millones de mordeduras venenosas alrededor del mundo, con Asia como la región donde ocurren con mayor frecuencia.
Desde 2017, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha declarado el envenenamiento por serpientes como una enfermedad tropical desatendida, ubicándola a la par de enfermedades como la chikungunya o la lepra.
El objetivo del organismo es disminuir la tasa de mortalidad o de discapacidad causada por las mordeduras de serpiente antes de 2030.
Durante sus viajes, Maharani comenzó a colaborar con hospitales locales y a entrenar a residentes y personal médico usando las guías de la OMS para estos tratamientos.
Pero las prácticas tradicionales, así como la percepción del problema, han sido difíciles de cambiar, especialmente para una mujer.
«La gente no esperaba que una experta en toxinas fuera una mujer. Me decían ‘señor Maharani'», cuenta.
«Me han maltratado, desafiado e incluso me han dicho groserías. También me han menospreciado, particularmente hombres que pensaban que eran más inteligentes que yo», añade.
Pero dice que su espiritualidad la ayudó a afrontar la adversidad: «Siempre he sabido que mi trabajo es salvar vidas. Ese es el llamado de Dios para que yo ayude a mi país».
De hecho, la indiferencia del gobierno ante el problema ha sido más difícil de afrontar que la discriminación por género.
Indonesia solo produce antídoto para neutralizar el veneno de tres especies de víboras, a pesar de que el país tiene cerca de 80 especies venenosas.
El otro problema es que esos antídotos hay que mantenerlos en frío, lo que dificulta su almacenamiento y transporte, especialmente entre las islas del archipiélago.
Esto significa que Indonesia depende mucho de antídotos importados y un tratamiento puede llegar a costar cerca de US$4.500.
Casos extremos
Hace cinco años, un niño de 12 años quedó inconsciente tras la mordedura de una víbora de Russell o de cadena en la remota isla de Lembata.
Pronto su condición médica se deterioró, hasta el punto en que sus riñones comenzaron a fallar y empezó a tener problemas en los músculos.
Maharani tuvo que volar a Tailandia para comprar el antídoto. Luego, tomó tres vuelos y durmió en el suelo de un aeropuerto para llegar a Lembata a tiempo.
Le dio al niño el antídoto gratis, tal como suele hacer.
La doctora afirma que ha gastado hasta el 90% de su salario en comprar antídotos para pacientes sin pedir remuneración.
«Estoy sana y siempre puedo encontrar más dinero. Pero si tengo un paciente moribundo, el antídoto es la principal necesidad. Así que tengo que priorizar, y la prioridad siempre es la vida de una persona», añade.
El padre del niño, que vendía agua de coco en una playa, le dio un coco enorme después de que su hijo despertó del coma y se recuperó por completo.
«Para algunos puede que el coco valga poco o nada. Pero para él era lo único valioso que tenía», afirma.
Su esfuerzo de estos años ha dado sus frutos y se ha ganado el apodo de «Reina de las Serpientes».
De acuerdo a Maharani, su campaña comunitaria ha llegado a millones de personas, y el sencillo procedimiento de inmovilización tras la mordedura de una serpiente se ha convertido en un protocolo común.
El año pasado, desarrolló con éxito un nuevo antídoto para la cobra de Java, común en zonas densamente pobladas como Yakarta y Bali. Pronto entrará en fase de producción experimental.
Pero, según cuenta, nada le ha dado más satisfacción que recibir a los colegas de su difunto padre, un médico militar.
«Antes de ser destinados a una zona remota, suelen venir a mi casa para recibir formación sobre mordeduras y antídotos», dice con orgullo.
Su ambición final es establecer la primera escuela clínica de toxinología del país y pasarle el mando para luchar contra la amenaza de las serpientes a una nueva generación de médico.
más historias de BBC News Mundo.
También puedes seguirnos en YouTube, Instagram, TikTok, X, Facebook y en nuestro nuevo canal de WhatsApp, donde encontrarás noticias de última hora y nuestro mejor contenido.
Y recuerda que puedes recibir notificaciones en nuestra app. Descarga la última versión y actívalas.









